El hecho de sobreescriturar una vivienda, significa que el precio de la misma aumenta considerablemente en comparación con el valor que esta va a tener en la operación de compraventa que se haya realizado, o se vaya a realizar.
Esto es algo que se suele hacer cuando se busca obtener un mayor porcentaje de financiación en los préstamos hipotecarios. No obstante, sobreescriturar una vivienda conlleva asumir una serie de riesgos que no son convenientes para todos los usuarios.
Es por esta razón que en este artículo analizaremos cómo se lleva a cabo este proceso y cuáles son los riesgos a tener en cuenta.
En qué consiste
Lo primero que tenemos que saber, es qué significa exactamente este concepto. La sobreescritura de una vivienda es ponerle a ésta un valor superior del que se le va a dar en la compraventa. Es decir, sobreescriturar una vivienda, implica darle un valor a ésta de 140.000 euros, cuando se ha adquirido por 110.000 euros.
Cuál es su finalidad
En la mayoría de los casos, se realiza la sobreescritura de una vivienda para obtener un porcentaje de financiación del préstamo hipotecario aún mayor que el que se hubiera conseguido con el precio base de la vivienda.
Y es que es necesario tener en cuenta que una hipoteca cubre alrededor del 80% respecto al precio de la vivienda. Por lo tanto, al aumentar el precio sobre la misma, el préstamo hipotecario aumentará a su vez, aportando mucha mayor financiación al usuario. Respecto al precio base de compraventa que asumió el usuario, con la sobreescritura se llega a conseguir hasta un 100% de financiación.
Normalmente, al llevar a cabo este tipo de operaciones se negocia entre las partes implicadas para asumir los costes de tributación de los que hay que hacerse cargo respecto al exceso de precio de la vivienda.
Sobreescriturar una vivienda es un acto totalmente legal, no se infringe ningún tipo de ley ni norma al respecto. Pero si hay que tener en cuenta que hacerlo conlleva una serie de riesgos a asumir que puede generar bastantes inconvenientes para el usuario.
Sus riesgos
Sobreescriturar una vivienda implica ciertos riesgos que son importantes conocer. Uno de los más comunes es sufrir un fraude, teniendo que hacer frente a una cantidad de dinero mucho mayor al que fue pactado inicialmente. También es probable tener que hacerse cargo de mayores gastos de tributación, o tener que soportar la revisión de la operación por parte de la entidad financiera que concede el préstamo.
En definitiva, llevar a cabo una acción como esta no es algo que los expertos aconsejen, y mucho menos no está orientado hacia usuarios que tengan aversión al riesgo. Por ello, es conveniente estudiar bien todos los pros y los contras que puede conllevar esta operación. Para tener claro si es realmente necesaria para nosotros o si podemos buscar otra alternativa mucho más fiable.